El miércoles 24 de junio, día de San Juan, ATECE acudió junto con Edurne y Susana y algunos miembros de la asociación GIELMAR, a uno de los mejores restaurantes del mundo con varias estrellas Michelín en su haber y multitud de galardones: el Restaurante Mugaritz del afamado chef Andoni Luis Aduriz.
Llegamos puntuales a la cita, algunos más nerviosos que otros pero todos con las mismas ganas de disfrutar de esta privilegiada visita. Nos acomodaron en la terraza, junto a un roble majestuoso de 250-300 años de antigüedad y nos sirvieron café. Todo eran mimos y atención. Joserra Calvo, una persona encantadora, nos explicó el significado del nombre del Restaurante y más adelante Andoni, cocinero perfeccionista, metódico y muy detallista, nos dio su particular visión sobre la comida y su efecto en nuestros sentidos y emociones. Nos mostraron el comedor y después Llorens Sagarra nos enseñó el taller del Restaurante, la cocina. Pillamos a todo el equipo manos a la obra preparando todo con mimo y detalle para las comidas y las cenas de ese mismo día. Todo estaba perfectamente atado y coordinado. Pulcritud y excelencia. Por último, ya fuera, nos llevaron a visitar la huerta del Restaurante dándonos para probar un lirio (comestible) con sabor distinto y bueno. Disfrutamos de las explicaciones de Leire Etxaide, una chica muy agradable, acerca de las hierbas aromáticas y especias que plantan allí para realizar salsas y condimentar los platos.
David Muñoz, dueño de DiverXO, calificó al Mugaritz en una entrevista hecha recientemente, como el restaurante que elegiría para la última cena de su vida. Dicho esto poco más quedar decir de este Restaurante (en mayúscula, sí) que si bien sufrió un incendio hace cinco años, Andoni y su equipo lo rescataron de las cenizas y vivieron esa desgracia como una oportunidad para darle un nuevo sentido. Ejemplo de superación también el de ellos. También de valentía por atreverse a ir directo a los cinco sentidos de sus clientes. Gusto. Tacto. Olfato. Oído. Vista. El resultado... emociones a flor de piel. Bonito viaje para hacer por lo menos una vez en la vida ¿no creéis? Pero sin pensar mucho cuándo porque hasta el mes de septiembre está el comedor reservado.
¡Mil gracias, Mugaritz!
(Texto elaborado con la ayuda de Gorka González Alejos)
"Lo posible de lo imposible se mide por la voluntad de un ser humano"
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